No es llegar y decir "soy el primero". Tampoco es que lo piense y ocurra. La gente puede pensar que es fácil llegar arriba sin mayores obstáculos, pero se nota que ellos no son "los primeros" en ninguna parte.La verdad, es que yo estudio y preparo el camino. Es cosa de contar, tomar el tiempo incluso. Mirar a nuestra competencia. Somos muchos los que queremos llegar a un mismo lugar, claro está. Muchos podremos hacerlo, y quizás no por eso alguno pierda la oportunidad. No se habla de algo excluyente, no. Pero, ¿por qué conformarnos con poco? ¿Por qué ser igual a la masa que todos los días veo a mi lado en estado comatoso en las mañanas? Miradas perdidas, a pesar del aliento a café. Otros, dejan en evidencia que "de apurados" no alcanzaron a ducharse.
No, yo no seré igual que ellos... me niego!!. ¡¡Los pasaré a todos!! Todos los días estudio como hacerlo. Ya lo tengo calculado y todo medido. Y creo que cada vez mejoro. Es gratificante avanzar en el camino y no ver a nadie que te alcance... Si, me lo merezco...
¿Y el secreto? Bueno, creo que ya no es necesario que lo oculte, pues ya he alcanzado la supremacía constantemente y nada cambiará eso. A pesar de esto, no lo divulguen, ¿está bien?
"Para estación Salvador, tomar el metro en la cuarta puerta desde la del chofer. Tomarse del pasamanos al costado de la misma. Al partir de Baquedano, pasar al frente a costo de empujones".
Con esto, y al primer sonido del chofer... corran... Corran y gozen lo que es ser el primero.
¡Adios, ilusos!
