miércoles, 5 de septiembre de 2012

Cómo cambiar el trazo, sin rasgar el frágil lienzo..? (Título alternativo: "El (sin)sentido de la vida")

Después de tanta voltereta argumental que en la práctica significaba poco y nada, he decidido (?) vivir solo. No soy una persona muy de tacto social, así que el cambio en ese sentido no ha significado mucho. Y menos considerando que la mayor parte de mi tiempo de vigilia trabajo con más gente. Aunque la configuración del espacio da para que la interacción sea bien esquematizada ... Podría decir fría, pero creo que depende de cada uno.

Dos semanas de vida le habían dado a la sobrina de una compañera de trabajo, que hace 7 meses aproximadamente llegaba con una sonrisa diciendo que su sobrina estaba mal, pero sabiendo que seguía dando la pelea contra todo pronóstico. Si bien esta estructuración de la interacción puede parece que hace todo más frío, de todas maneras uno captaba la sensación de saber que el milagro podía ocurrir. Y más, en una persona que siempre se mostró positiva y nunca apenada. Potenciaba ese milagro podía decirse...

Potenciaba...

Hoy me paré de mi puesto por 5 minutos y al llegar estaba con dos compañeras más, llorando... Le avisaron que la niña estaba agonizando. Se fue a la clínica a estar con ella y sus padres. Al verla a ella quebrada (como nunca jamás antes), me hizo pensar en cómo podrían estar sus padres, y más allá, lo frágil que es esta puta vida... Fuera de todo clásico cliché y fuera de todo pensamiento empaquetado. 

Si el sentido de la vida es la reproducción (como casi todo el mundo apunta), entonces estoy muy mal. Si el sentido de la vida es otro, creo ... estoy seguro, la verdad, que también voy muy mal comparado con ese "lo que sea".



Cuando tenga esos momentos solos en donde la mente empieza a volar, y más ahora que estoy viviendo solo, trataré de ahogar cada posible respuesta al sentido de la vida, con música o libros. No quiero la certeza de lo mal que estoy, ni tampoco recordar esa respuesta cuando tenga mis últimos momentos. Y pensar que estaba equivocado (o no).



No sé...

Hoy creo que no sé nada...